Crioterapia acelera recuperación del deportista
Como parte de las técnicas modernas para la recuperación del daño muscular inducido por ejercicio en el deportista, posterior a una competencia, la crioterapia, mediante inmersión en agua fría revoluciona como el nuevo paradigma en la recuperación del atleta. Así lo comentó Braulio Sánchez, investigador de la Escuela de Ciencias y del Movimiento Humano de la Universidad Nacional (Ciemhcavi-UNA).
Sánchez comentó que en un primer estudio de corte meta-analítico, realizado en el 2015 en la Ciemhcavi y en el que se analizó el efecto de las inmersiones de agua fría como método de recuperación de la fatiga, contra inmersiones de contraste frío/calor, se evidenció que las inmersiones en agua fría son efectivas en la reducción del dolor a las 24 o 48 de horas post inmersión y en la disminución de indicadores fisiológicos como la fofocreatina (indicador de daño muscular) inducido por ejercicios de alta intensidad.
Agregó que en el caso de las inmersiones de contraste frío-calor se demostró que las mismas no son efectivas para reducir el comportamiento fisiológico de estos indicadores a nivel de daño muscular.
La inmersión a una piscina de agua fría después del esfuerzo produce un efecto de vasoconstricción y presión hidrostática, lo cual favorece la recuperación en indicadores del daño muscular.
Recuperación efectiva
Un estudio publicado en 2017 por científicos de la Ciemhcavi, realizado con jóvenes jugadores de baloncesto, quienes se sometieron al protocolo de inmersión a 12 minutos, a 12 grados de temperatura, encontró que tanto a las 24 como a las 48 horas, los indicadores de recuperación como el rendimiento en la capacidad de salto y la percepción del dolor muscular mejoraron de forma significativa; es decir, que el grupo que recibió inmersiones de agua fría a las 24 y 48 horas ve menos afectada su capacidad de salto y su percepción es menor que aquellos que no recibieron la inmersión.
Sánchez destacó que en los últimos años las inmersiones en agua fría se han convertido en uno de los métodos de recuperación más utilizados en ciencias del deporte, con el fin de minimizar la fatiga y acelerar los procesos de recuperación. Varias revisiones y metanálisis informaron el efecto beneficioso de estos métodos de recuperación. “Dicho método es tan efectivo que muchos deportistas de élite lo usan para estar en óptimas condiciones para dar el máximo esfuerzo.
Ambos protocolos de inmersión (continua e intermitente) son muy eficaces para reducir los signos de fatiga, específicamente el dolor muscular tardío y la recuperación de la capacidad de salto. Cualquiera de los protocolos podría ser utilizado por los atletas después del entrenamiento para ayudar a su recuperación según las preferencias individuales.
Para este y el próximo año Ciemhavi-UNA adquirió modernos equipos que incluyen piscinas inflables con motores capaces de enfriar y calentar el agua, para realizar más investigaciones tanto en el uso de inmersiones en frío y en contraste, bajo distintos protocolos. Se espera que los resultados se den a conocer a finales del 2018.