top of page

Hacia ganaderías lecheras sostenibles

Las fincas lecheras deben variar a procesos más amigables con el ambiente, de manera que repelan la emisión de los gases de efecto invernadero.


Congruencia entre los sectores académico, investigativo, político y empresarial para que la ganadería lechera se encamine hacia una eficiencia productiva, acorde con la naturaleza, de manera que desaparezca el estigma de ser un sector que genera altos índices de contaminación, es una de las principales conclusiones del foro Sostenibilidad ambiental de la ganadería de leche. Este foro fue parte de la primera Jornada de Investigación en Ganadería de Leche, organizada por la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Nacional (UNA) y la Cámara Nacional de Productores de Leche.



Foto Víctor J. Barrantes


Asimismo, procuró posicionar al sector lechero como una actividad productiva ambiental y social sostenible. A la vez, apostó por la implementación de sistemas silvopastoriles unidos a prácticas de manejo ganadero, los cuales presentan resultados exitosos para el mejoramiento de la productividad y la rentabilidad, la generación de servicios ecosistémicos, la reducción de la huella de carbono y la adaptación al cambio climático, frente a la ganadería basada en enfoques tradicionales.


El sector ganadero vislumbra algunos retos como el relevo generacional o los mecanismos para emplear la tecnología, independientemente del propietario. También el hecho de tener el tiempo en contra, ya que los cambios obligados sobre la desgravación arancelaria, en el marco del Tratado de Libre Comercio, no se pueden ejecutar en el mediano plazo, sino lo más pronto posible, de la mano con los diversos actores sociales, y así marcar las pautas hacia la ganadería sostenible.


Esta actividad, realizada en el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), tuvo como fin promover la interacción dentro del sector, con el fin de plasmar las necesidades puntuales y promover proyectos de importancia estratégica. Asimismo, establecer iniciativas de investigación más articuladas y que generen un mayor impacto en el sector lechero.




Política pública


Mauricio Chacón, representante del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), externó que la política pública para una ganadería sostenible, denominada Estrategia de Ganadería Baja en Carbono (EDGBC), constituye un claro ejemplo de cómo la acción climática es posible para lograr una descarbonización de la economía costarricense, de existir el trabajo conjunto.


Agregó que las metas de carbono neutralidad y los esfuerzos que deriven de las proyecciones orientadas hacia un modelo de desarrollo sostenible deben incluir esfuerzos que integren una visión de gobernanza, basada en una gestión pública participativa, de cara a establecer una política pública, a partir de confianzas y objetivos comunes.


“Dentro de la política del sector agropecuario existe el pilar de cambio climático, el cual brinda el asidero político para la consolidación de una estrategia ganadera, que se enfoca en más productividad, rentabilidad, secuestro de carbono y menos emisiones de gases de efecto invernadero”. Recalcó que dicha estrategia apunta hacia la eficiencia productiva y competitividad con enfoque climático, con el fin de revertir la imagen de que el sector ganadero afecta al ambiente.


Foto Víctor J. Barrantes


Conservar la biodiversidad


Diego Tovar, investigador del programa de ganadería y manejo del medio ambiente del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (Catie), indicó que el trabajo no solo debe orientarse a la reducción de emisiones, sino a la responsabilidad de conservar la biodiversidad dentro de las fincas ganaderas lecheras, ya que representan uno de los principales focos para la conservación del ecosistema, al encontrar áreas y remanentes de bosque, los cuales incrementan la conectividad mediante los bosques ribereños.


Destacó que el incremento de la cobertura arbórea sobre las pasturas, como cercas vivas y árboles dispersos, favorecen el incremento de la conectividad del paisaje y contribuyen con la biodiversidad. “No solo se tiene que considerar la huella de carbono, sino también el manejo y uso eficiente del agua”.


Muhammad Ibrahim, gerente de Innovación del IICA, dijo que en el contexto global, cuando se hace referencia a la ganadería, existen dos puntos esenciales en torno a la sostenibilidad ambiental: por un lado, las emisiones de gases de efecto invernadero, donde las fincas ganaderas lecheras contribuyen entre un 15 y un 14 por ciento con las emisiones y, por el otro, la huella hídrica de la producción lechera, según la cual por cada kilogramo de leche producido se requieren alrededor de 1.000 litros de agua en el proceso (la que consumen las vacas, la que se usa para lavar, irrigar campos y otras actividades).


En ese sentido, Ibrahim propuso buscar una mayor capacidad adaptativa de las fincas para lograr mayor resistencia a los efectos del cambio climático. A la vez, incentivar estrategias público-privado para crear un seguro de manejo de riesgos por efectos de la sequía. También, la importancia de enfocarse en los sistemas silvopastoriles y la planificación territorial de la ubicación de las fincas para lograr una mayor sostenibilidad ambiental.


Ambiente y economía


José Antonio Madriz, de la Cámara Nacional de Productores de Leche, argumentó que la sostenibilidad ambiental debe ir de la mano con la sostenibilidad económica del productor y para alcanzar estas metas se debe mejorar la investigación aplicada en calidad y cantidad, así como a transferirla mejor de lo hecho hasta ahora. “Se debe fomentar el uso de una fertilización racional estratégica, revaluar la genética animal y variar el método de energía utilizada en la finca para bajar la huella carbónica”.


Sergio Abarca, del Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (Inta), explicó que una alternativa viable es intensificar la ganadería, siempre y cuando sea de pastoreo, por su aporte ambiental, lo cual contribuirá a alcanzar la meta de contar con fincas lecheras amigables con el ambiente.




*** Mayor Información con: Dr. Carlos Luna. (2562-4526) o con la Oficina de Comunicación de la UNA (2277-3464).



bottom of page